He de gastar todas mis palabras
en un abrazo sutil de sonidos;
mi leve suspiro
se transformará de la hoja al papiro
para dar paso
a un cálido beso
que ha guardarse en tus labios dormidos.
Mis manos se dejarán ser presas
de tus delicados dedos:
de tu fragilidad femenina
de la que tanto me he enamorado
con el leve paso del tiempo.
Serán mi cárcel diez milagros,
diez perfectas trampas de piel.
Hemos de quedarnos
atados a las muñecas
para deborarnos el silencio
en un abrazo ahogado.
Me acabaría tiempo y espacio
en un "te quiero a mi lado",
más no sería bastante
esta vida y otra
para darte mi amor de universo
contenido en una canción, en un poema...
en un infinito verso.
Quédate como la luz en la llama,
quédate como el aire en el mundo,
como mi alma en el cuerpo,
como todo espacio lleno.
Quédate... es mi único deseo
poema escrito el 4 de septiembre de 2010
José "Saiset" González.
Caballero de la Sacra Orden de la Letra Púrpura
Derechos reservados
orale Saiset, me ha encantado tu blog.. soy fan de tus textos... te envio un abrazo muy fuerte y un bezaso!!!!!
ResponderEliminar