en aquella inmensidad virtual...
pobres de nuestros brazos:
sueñan a tocarse leve y frágilmente
Y yo, aquí sentado, pensando
en cosas secretas,
tan secretas como nuestras charlas de café
de alegres tardes mecánicas.
Una letras, un renglón...
un saludo, un adiós... ahí viene la broma,
lo recuerdas como yo
digo que te amo, que te adoro,
que tú mi vida y yo tu amor...
sin pensarlo más, mira que alegre soy.
Poema escrito el día 4 de julio de 2010
José "Saiset" González
Derechos reservados
No hay comentarios:
Publicar un comentario